FFmpeg es un software muy conocido en el mundo de la tecnología, utilizado por grandes empresas como YouTube, Netflix y Spotify. ¿Para qué se usa? Básicamente, FFmpeg permite codificar y descodificar audio y video, lo que significa que puede convertir archivos de un formato a otro, algo muy útil en plataformas de streaming. Recientemente, se ha descubierto algo sorprendente: FFmpeg puede funcionar hasta 94 veces más rápido utilizando un lenguaje de programación que casi nadie usa hoy en día.
El truco detrás de esta increíble mejora es el uso del lenguaje ensamblador. Este lenguaje es bastante antiguo y complicado. A diferencia de los lenguajes de alto nivel como Python o Java, el ensamblador permite que el software acceda a los recursos del computador de una manera mucho más directa. Esto significa que puede controlar cada operación que realiza el procesador, haciendo que el software sea mucho más eficiente.
Un grupo de desarrolladores que trabajan en FFmpeg decidió probar este antiguo lenguaje utilizando instrucciones especiales llamadas AVX-512. Estas instrucciones permiten que el computador procese grandes cantidades de datos al mismo tiempo, lo cual es ideal para tareas como el procesamiento de audio y video. Las pruebas de rendimiento demostraron que las funciones escritas en ensamblador con estas instrucciones especiales se ejecutaban mucho más rápido que las implementaciones tradicionales. En algunos casos, el software llegó a funcionar 94 veces más rápido.
Aunque estos resultados son impresionantes, existen algunos desafíos. Intel, uno de los mayores fabricantes de chips para computadores, desactivó estas instrucciones en algunos de sus procesadores. Sin embargo, hay formas de volver a activarlas. AMD, otro gran fabricante de chips, sí soporta estas instrucciones. El verdadero problema radica en la complejidad de estas optimizaciones, que se reservan para aplicaciones muy específicas. Aun así, es posible que grandes empresas tecnológicas se aprovechen de estas mejoras para procesar audio y video en sus centros de datos.
El lenguaje ensamblador, aunque poco utilizado, sigue siendo muy poderoso. Los lenguajes de programación más modernos y fáciles de usar, como Python o Java, han hecho que programar sea más accesible para todos, pero también pueden ser menos eficientes. Python, por ejemplo, es conocido por su facilidad de uso y su amplia comunidad, pero no accede a los recursos del hardware de manera tan directa como lo hace el ensamblador.
FFmpeg es un claro ejemplo de cómo algunos proyectos pueden beneficiarse enormemente del uso de este antiguo lenguaje. En resumen, la mejora significativa en el rendimiento de FFmpeg gracias al uso del lenguaje ensamblador y las instrucciones AVX-512 es un avance notable. Aunque hay desafíos para su adopción masiva, las grandes empresas tecnológicas pueden aprovechar estas ventajas para optimizar sus procesos de procesamiento de audio y video.